PAN CASERO

Hoy vamos a preparar nuestro propio pan casero. Con esta receta no necesitaremos masa madre y nos saldrá un pan muy crujiente. No es nada difícil de hacer, lo más entretenido es el tiempo de levado que necesita. He elaborado esta receta varias veces y he hecho montaditos de varios tipos, pero también podemos prepararnos un buen bocadillo jejeje.

INGREDIENTES: (con estas cantidades salen 2 panes grandecitos)

- 500 gr. de harina de fuerza

- 300 gr. de agua

- 10 gr. de sal

- 6 gr. de levadura seca de panadero

PREPARACIÓN:

Cogemos un bol amplio para poder empezar a amasar nuestro pan cómodamente. En él ponemos la harina, la sal, la levadura y mezclamos todo muy bien.

Cuando los ingredientes secos estén bien mezclados, le incorporamos el agua y empezamos a amasar.

Una vez que veamos que la masa no se pega a las paredes del bol, la pasamos a una superficie plana espolvoreada con una poca de harina para que no se pegue y seguimos amasando durante unos 10 minutos. Si vemos que la masa queda muy seca le añadimos una poca de agua y si ocurre lo contrario, que la masa es pegajosa, le añadimos una poca de harina.

Una vez que hayamos terminado de amasar cogemos un bol, lo enharinamos con una poca de harina para que la masa no se pegue, la introducimos en éste, volvemos a espolvorearla con harina y tapamos el bol con un paño. Dejamos reposar durante una hora o hasta que doble su volumen. Un truco para que la masa leve bien es calentar el horno a unos 50º, apagarlo y meter el bol. Así tardará menos tiempo en doblar su volumen.

Pasado este tiempo es la hora de desgasificar la masa, es decir, volver a amasarla levemente para sacarle el aire. Le damos la forma que deseemos. Podemos hacer una hogaza, una barra, bollitos, etc., lo que queramos. Volvemos a dejar otra hora reposar la masa o a que vuelva a doblar su volumen.

Cuando ya esté lista, le hacemos unos cortes y le espolvoreamos una poca de harina.

Precalentamos el horno a 210º y metemos dentro un recipiente con agua para que se le forme una costra crujiente a nuestro pan. Horneamos durante 35 minutos. Para saber si el pan está listo, lo golpeamos con un cuchillo y si suena hueco es que ya está en su punto. Sacamos y dejamos reposar en una rejilla.

Ya está listo nuestro pan casero. Parece que es un poco lioso de preparar, pero es facilísimo y el resultado merece la pena. Probad a hacerlo y ya veréis.